La natación es el deporte más completo que existe y el mejor para recuperarnos de las lesiones gracias a su ingravidez. Además de ello, nos ayuda a tonificar piernas y torso; a ganar fuerza sin pasar por el gimnasio y, sobre todo, a mejorar nuestro bienestar. No en vano, gastamos hasta cinco veces más caloría en el agua que fuera del vaso.