Los alimentos son la base de una buena alimentación y parte fundamental de cualquier dieta. Estas se basan en distintos tipos de alimentos que tratan de proporcionarnos todo lo que necesita nuestro organismo y cuidar de nuestra salud y bienestar a través de la pirámide de la salud y bienestar.
Se trata de cualquier sustancia sólida o líquida que se puede ingerir para compensar el desgaste del cuerpo con la actividad diaria. En etapas más tempranas, ayudan al crecimiento, y pueden mejorar el desarrollo en la práctica del deporte o hasta aliviar ciertas dolencias.
Estos se dividen en: Hortalizas-verduras, Frutas, Cereales, Lácteos, Grasas-aceites, Frutos secos, Especias y condimentos, Legumbres, Pescado, Huevo y Carne, que puede ser tanto blanca como roja.
Agrupa verduras, frutas y cereales; así como las semillas, las legumbres y los frutos secos.
Comprende el ganado: ovejas, cerdo o cabra; aves de corral: pavo o pollo entre otros; mariscos y pescado. También lo hace con los derivados de los animales, como los lácteos: leche, queso, mantequilla o huevos; así como la miel o las salchichas, entre otros productos.
Se tratan de aquellos que proceden de minerales, como la sal —cloruro de sodio (NaCl)—.
Aportan vitamina A, vitamina B, vitamina C, vitamina D, hierro, proteínas, calcio, carbohidratos o grasas, además de aminoácidos, entre otros nutrientes.
Los médicos recomiendan comer de tres a cuatro piezas de fruta diariamente. Asimismo, también abogan sobre el consumo diario de verduras y hortalizas.